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septiembre 07, 2021 4 lectura mínima
A la hora de elegir un nuevo instrumento de escritura se abre un amplio abanico de posibilidades frente a nosotros que nos ofrecen una experiencia de escritura totalmente diferente. Los resultados de escribir con una pluma estilográfica, un roller o un bolígrafo son muy diferentes, por ello, vamos a explicar cómo diferenciar unos instrumentos de otros para poder decidir qué opción se adapta mejor a su escritura.
La tinta y el mecanismo que tengan en la punta, serán factores determinantes para distinguir estos tres elementos de escritura desde el punto de vista funcional, pues condicionarán la experiencia de escritura del usuario y el resultado de la tinta sobre el papel.
La estilográfica es el elemento de escritura más clásico y tradicional, presenta un plumín que permite el flujo continuo de tinta hacia la punta del mismo. Gracias a este elemento, es fácil distinguir a simple vista una estilográfica de un bolígrafo o un roller.
La pluma estilográfica es símbolo indiscutible de la escritura a mano. Las posibilidades caligráficas que ofrece se multiplican gracias a la gran variedad de plumines y puntos disponibles, que determinarán, por ejemplo, el grosor del trazo sobre el papel.
La experiencia de escritura proporcionada por una pluma estilográfica es suave y fluida ya que el plumín se desliza fácilmente sobre el folio. El caudal de tinta fluye desde el primer momento que la pluma toca el papel, garantizando un trazo preciso y uniforme. El acabado de nuestra caligrafía será de aspecto oscuro, saturado y brillante. Generalmente, las tintas para estilográficas están elaboradas a base de agua, si quiere saber más acerca de cómo elegir tinta, puede visitar este post.
Los bolígrafos o ballpoints presentan un mecanismo de bola que supuso una ruptura con las tradicionales estilográficas. Ladislao José Biro buscaba la manera de crear una estilográfica anti manchas, y en 1938 patentó este sistema que se le ocurrió al ver el reguero que dejaba una pelota al salir de un charco de agua. El mecanismo presenta una pequeña bola en la punta que al presionar sobre el papel deja salir la tinta. Dicha bola evita que la tinta se seque o que se salga mientras el bolígrafo no está siendo utilizado.
El mecanismo de cierre que utilizan este tipo de instrumentos para guardar su punta suele ser de giro como la colección de bolígrafos S.T. Dupont Defi o retráctil como la línea Aurora TU.
La experiencia de uso de los bolígrafos, a diferencia de la de las plumas estilográficas y los roller, se caracteriza por el uso de una tinta de base oleosa que garantiza una mayor permanencia, pero una menor fluidez al escribir. Este factor, unido a su tipo de punta que ejerce una mayor resistencia a deslizarse por el papel, dan como resultado una caligrafía de aspecto menos saturado y más seco, grueso y espeso.
El escritor, podrá variar la intensidad del trazo según la presión que ejercida.
El roller nace de la necesidad de crear un instrumento más fino que el bolígrafo y que se deslice sobre el papel con la suavidad de la pluma estilográfica. Por ello, la punta de los rollers es fija, haciendo que la experiencia de escritura sea mucho más fluida. Popularmente, los rollers se conocen como bolígrafos de gel.
Precisamente por presentar una punta fija, corremos el riesgo de que la tinta se seque si no lo cerramos correctamente. Por ello, el sistema más habitual de cierre que presentan es el capuchón, un elemento clave para diferenciar a simple vista un bolígrafo de un roller.
El resultado ofrecido por un roller se asemeja al ofrecido por una pluma estilográfica. La experiencia de escritura es suave y fluida ya que la tinta fluye sin que el usuario tenga que ejercer presión. El acabado de la tinta sobre el papel es más oscuro y saturado que el que obtendríamos con un bolígrafo.
Como comentábamos antes, la tinta utilizada en el caso de las estilográficas y los rollers es de base acuosa, por lo que es absorbida con mayor rapidez por el soporte de celulosa, lo que se traduce en un secado más inmediato. Así, si pasamos el dedo sobre un escrito que hayamos realizado recientemente, se emborronará menos si hemos usado un roller.
En la siguiente imagen podemos apreciar las diferencias de saturación e intensidad de las tintas, y la mayor rapidez de adherencia al papel de la tinta, pues al deslizar el dedo sobre el escrito tras 2, 5 y 15 segundos podemos ver como el resultado del roller queda más definido.
Sin embargo, los escritos realizados con bolígrafo tendrán una mayor permanencia a lo largo del tiempo, y ofrecerán más resistencia al agua gracias a su tinta de base oleosa.
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