¿Cómo cuidar mis productos de relojería?

Los relojes son piezas delicadas y, como tales, necesitan de cierto cuidado para que su vida útil sea lo más larga posible y puedan mantener la misma precisión que en sus primeros años. En Iguana Sell, queremos ofrecerles una serie de consejos básicos para el mantenimiento óptimo de su reloj automático, de cuarzo o mecánico; en definitiva, de su colección de relojes. 

10 CONSEJOS PARA CUIDAR SU RELOJ

1. Póngalo correctamente

Se recomienda llevar el reloj en la muñeca contraria a la mano con la que escribimos (para evitar arañazos en la esfera y desgaste de la correa) y ajustado pero sin que llegue a molestar ni apretar. 

2. Guárdelo en un sitio adecuado

Es recomendable guardar los relojes en un sitio donde puedan estar protegidos, como por ejemplo su caja original, evitando así cualquier tipo de caída o arañazo. Además, es importante no guardarlo nunca boca abajo ni junto con otros accesorios, ya que con la fricción puede llegar a desgastarse. 

3. Mantenga una rutina de limpieza 

Es importante limpiar nuestro reloj para mantenerlo en buenas condiciones. A los relojes fácilmente se les acumula suciedad por llevarlos, o polvo por no hacerlo. Por este motivo, lo ideal es pasar regularmente un paño seco de algodón por la caja y el brazalete o correa para eliminar el polvo y los restos de sudor. Si el reloj es resistente al agua y la correa no es de piel, puede hacerlo con un paño humedecido en agua para una limpieza más profunda.

4. Evite los golpes y accesorios que puedan producir arañazos

Aunque parece una obviedad, a los relojes hay que tratarlos con cuidado. Los golpes fuertes y las caídas pueden provocar arañazos, roturas de cristal o averías internas en el reloj. Para prevenir estos problemas, lo mejor es quitarse el reloj para realizar deporte o llevar relojes apropiados para este tipo de actividades. Marcas como Victorinox o Luminox nos ofrecen una amplia colección de relojes de cuarzo y automáticos diseñados para las condiciones más extremas. 

Marcas como Victorinox o Luminox se especializan en la creación de piezas para resistir las condiciones más extremas. En la imagen, el reloj automático Victorinox I.N.O.X. Carbon

5. Aléjelo de las sustancias y productos químicos

Las cremas, los jabones, los detergentes y los perfumes pueden dañar la caja o la correa de un reloj, sobre todo si ésta es de piel. Además, la luz solar directa prolongada directamente sobre el reloj puede provocar su decoloración.

6. Compruebe su hermeticidad

Es esencial comprobar la hermeticidad de cualquier reloj antes de sumergirlo en el agua ya que algunos factores como la humedad pueden estropearlo. En Iguana Sell recomendamos que se compruebe cada 12 meses, preferiblemente antes de verano. En el caso de los relojes automáticos, a menos que la marca del reloj permita lo contrario, es recomendable no pulsar los botones encargados del funcionamiento del cronógrafo debajo del agua. Si los pulsamos, podría entrar agua y dañar el reloj. En los relojes con corona a rosca hay que asegurarse de que está debidamente enroscada antes de meternos en el agua.

7. Revisión continua

Sobretodo para el caso de los relojes automáticos, es conveniente que se le haga una revisión cada 4 años, ya que con el tiempo los relojes dejan de funcionar como deberían. En el caso de los relojes de cuarzo lo recomendable es cambiar la pila cada 2 años, incluso aunque esta no esté agotada. De esta forma, evitamos que el reloj se detenga de forma repentina y prevenimos posibles problemas causados por una pila que no funciona. Si la pila está agotada, lo ideal es cambiarla cuanto antes, ya que puede sulfatarse y dañar gravemente el movimiento del reloj.

8. Úselo de manera periódica

Los relojes están pensados para funcionar continuamente. El escape de un movimiento normal es capaz de registrar 2.488 millones de alternancias en un solo día sin que le perjudique. Que un reloj esté funcionando es el mejor modo de conseguir que sus lubricantes no se solidifiquen y, en consecuencia, se desajuste el mecanismo.

9. Cuide la correa

Sobre todo si es de piel, pues el cuero es un material natural delicado de manejar en climas cálidos. Se aconseja no apretar demasiado la banda para evitar una tensión innecesaria y dejar descansar al reloj, es decir, quitárselo a la hora de dormir para que tanto la muñeca como la correa respire.Para las personas que practican habitualmente deportes en el agua, la correa de caucho es perfecta, ya que ésta no absorbe ni el sudor ni la humedad.

Sea del tipo que sea, cuide su correa de cuero para mantenerla en perfectas condiciones el mayor tiempo posible.

10. Retírelo antes de irse a dormir

Mientras dormimos no somos conscientes de nuestros movimientos y esto puede provocar un golpe en el reloj o una rayadura en su esfera o en cualquier otro detalle visible. Dejarlo por la noche en la mesilla puede ser una buena opción para evitar sustos innecesarios.

Todos estos consejos que le proporcionamos son medidas muy razonables y fáciles de cumplir con un poco de cuidado. Por mucho que hablemos del peligro del agua, del sol o de que los imanes son peligrosos, hay que recordar que son medidas preventivas y que los relojes son más duros de lo que podemos pensar. Lo mejor, llevarlo con cuidado, pero sin miedo. Será el mejor modo de disfrutar de estas piezas tan especiales.

Si desea saber más consejos sobre el cuidados de relojes, no dude en visitar nuestra página web y nuestros próximos blogs, o en contactara nuestros expertos.

¡Le esperamos!